Cada momento en la ceremonia de la narración de un cuento, es único e irrepetible. Porque depende del tono, énfasis o las variaciones del narrador hacia su audiencia. No hay dos veces iguales. Aunque nos guste oir una y otra vez la misma historia y reconocer incluso identificarnos en los elementos y personajes de la propia historia. Así lo hemos hecho durante siglos oyendo una y otra vez las mismas historias que han ido modificándose y adoptando matices según culturas y procedencias geográficas. Así hemos oido el cuento de "Cenicienta" desde la época de los egipcios y en sus diferente versiones, provenientes de civilizaciones como China, Persia, Roma y luego Italia, Alemania, Francia o Rusia. Pero lo mismo ha sucedido con otros cuentos como el de "Hansel y Gretel", Periquín y Periquina en su versión castellana.
A nosotros nos gusta leer y revisitar estas historias. Y lo hacemos utilizando solamente imágenes, sin palabras, así de este modo como dice Antonio Muñoz Molina, autor del epílogo de nuestro "Hansel y Gretel", las imágenes se convierten en esa partitura a través de la cual la imaginación del niño o del adulto reconstruirá la historia, siempre sabida y siempre nueva; en el momento en el que se toma el libro y se pasan las páginas, los dibujos inspiran un relato que será siempre el mismo y será otro: el que nos contaban a nosotros, el que a nuestros padres les contaron sus padres, el que nosotros contaremos a nuestros hijos y alguna vez contaremos a nuestros nietos. Como si se tratara de la partitura de un standard de jazz, el libro es solo un punto de partida y espera el toque e interpretación del músico.
Y de este modo único e irrepetible, hemos querido celebrar esta segunda vez, que supone la segunda edición de nuestro "Hansel y Gretel". Haciendo una mini edición de una serie de 5 cajas especiales que contienen cada una el libro, junto con una pareja de "Hansel y Gretel" a las que Blanca Helga ha sabido dar vida maravillosamente. Y otros elementos en el interior de cada caja, como un saco de guijarros, una cajita casa, un pájaro de cartón y algunos dulces. Lo que pretendemos es que los cuentos estén vivos en nuestros días y que la presencia de estos elementos ayuden a mantener vivo el fuego de cada narración.
Fueron Jacob y Wilhem Grimm los que recogieron directamente de boca de ancianos las historias que otros les contaron a su vez. Y nosotros pretendemos continuar su legado contándolos a nuestro modo, a través de las imágenes de los pasajes que nos han sugerido sus historias. Y para elevar el mensaje de estas historias maravillosas que son los cuentos, nos hemos apoyado de una segunda voz. La de algunos, lectores y escritores, perfectos conocedores y entusiastas de esos cuentos, quienes han escrito cada uno de los epílogos que a partir de ahora acompañaran los libros de nuestra colección de clásicos de la tradición oral, sin texto. Les estamos enormemente agracecidos porque con su ayuda esperamos continuar esa voz, la que animaba las veladas tras la jornada de trabajo de las que nos habla Antonio Muñoz Molina, autor del texto que acompaña a "Hansel y Gretel" o las ganas de voz de la que habla Gustavo Martín Garzo en el texto que acompaña nuestra Caperucita roja, " Y recuerda..." O la voz tímida y mesurada de Cenicienta frente a la arrogante de aquella madastra y sus frívolas hijas de la que habla Teresa Duran en el texto que acompaña nuestra "Cinderella".
Estas imágenes muestran el contenido de cada caja. En ellas se puede apreciar la delicadeza con la que ha trabajado Blanca Helga, recortando con sus própias manos sobre cartón y cuidando cada uno de los detalles que dan forma a las 5 parejas, cada una con rasgos que las hacen únicas y diferentes respeto a las otras, firmadas y numeradas, disponibles en nuestra tienda de Etsy. Porque no hay dos veces iguales.